Las fijaciones de polímero se utilizan en una amplia gama de aplicaciones en las que la exposición a altas temperaturas podría ser un problema, y ofrecen varias ventajas sobre las fijaciones metálicas tradicionales.
Algunos ejemplos de aplicaciones de fijaciones de polímero para altas temperaturas son:
Industria aeroespacial: Las fijaciones de polímero se utilizan a menudo en la industria aeroespacial como alternativa ligera y resistente a la corrosión a las fijaciones metálicas. Pueden soportar altas temperaturas y mantener sus propiedades mecánicas a temperaturas elevadas, lo que los hace adecuados para su uso en aplicaciones estructurales.
Industria del automóvil: Las fijaciones de polímero también se utilizan en la industria del automóvil, sobre todo en componentes de motores y sistemas de escape en los que se alcanzan altas temperaturas. Pueden soportar altas temperaturas y mantener sus propiedades mecánicas, lo que los hace adecuados para su uso en estas aplicaciones.
Industria electrónica: Las fijaciones de polímero se utilizan en la industria electrónica para fijar componentes y proporcionar aislamiento eléctrico. Pueden soportar altas temperaturas y mantener sus propiedades de aislamiento eléctrico, por lo que son adecuados para estas aplicaciones.
Adhesivos y revestimientos: Las fijaciones poliméricas también se utilizan en la producción de adhesivos y revestimientos, ya que pueden soportar altas temperaturas y mantener sus propiedades adhesivas.
Las fijaciones poliméricas de alta temperatura son una herramienta útil en una amplia gama de aplicaciones en las que se dan altas temperaturas. Ofrecen varias ventajas con respecto a las fijaciones metálicas tradicionales, como su ligereza y su resistencia a la corrosión, así como su capacidad para soportar altas temperaturas y mantener sus propiedades mecánicas y eléctricas.