Existen varios tipos de fijaciones de polímeros resistentes a la corrosión, como las fijaciones de polieteretercetona (PEEK), las fijaciones de sulfuro de polifenileno (PPS) y las fijaciones de fluoruro de polivinilideno (PVDF). Los elementos de fijación de PEEK son conocidos por sus excelentes propiedades mecánicas y térmicas, que los hacen adecuados para su uso en una amplia gama de aplicaciones. Los elementos de fijación de PPS también son conocidos por sus buenas propiedades mecánicas y térmicas, así como por su resistencia a los rayos UV y a la intemperie. Los elementos de fijación de PVDF son conocidos por su excelente resistencia química, lo que los hace adecuados para su uso en entornos corrosivos.
Además de estos tipos de fijaciones de polímero resistentes a la corrosión, también hay varios revestimientos que pueden aplicarse a las fijaciones de polímero para mejorar su resistencia a la corrosión. Estos revestimientos proporcionan una capa adicional de protección al elemento de fijación, ayudando a prevenir la corrosión y a prolongar su vida útil.
Hay varios factores que pueden afectar a la resistencia a la corrosión de una fijación polimérica, como el tipo de material polimérico, el entorno en el que se utiliza y el tipo de revestimiento que se aplica. Es importante tener en cuenta estos factores a la hora de seleccionar elementos de fijación de polímeros resistentes a la corrosión para asegurarse de que son adecuados para la aplicación prevista.